Federico
León Jiménez.
Pillpinto
(Cuzco), pasará a la historia, además de ser un pueblo histórico, enclavado en
las alturas de la sierra, también por presentar una manera peculiar de elegir
autoridades. Su último electo alcalde (2014), alcanzo no la más alta votación,
sino que junto a su contendor, definieron la alcaldía a través del sorteo es
decir MONEDA AL AIRE.
Esperemos
que esto no ocurra en Tumbes, que no
tengamos que dejarle el trabajo al azahar, a la moneda y al simple destino.
Porque tenemos que ser capaces de entender, que nuestra más grande hazaña no
solamente radica en votar y elegir al mal menor, no. Reconozcamos que a la
persona que le demos nuestra confianza y depositemos en él nuestro destino a
través del voto popular y guardián de nuestras esperanzas. Ya elegido, se convierte
en depositario de todos nuestros sueños como pueblo, raza y por lo tanto debe
ser alguien que muestre entereza espiritual y física. Espiritual, porque es a
quien vamos a tener al frente y será el
norte de todos los ideales de los tumbesinos; espiritual, sí, porque
después de las experiencias inciertas y llenas de cúmulos de incapacidad,
conformismo e inseguridad. Se hace necesario que el próximo gobernante regional
sea como la mujer del César: “No solamente honesto sino parecerlo”.
Y sea capaz de cubrir las múltiples e ingentes y muy necesarias necesidades en:
Educación, salud, agricultura, pesca, seguridad ciudadana, industria,
saneamiento ambiental, recursos naturales, ordenamiento y otros que representan
en su conjunto aspectos fundamentales de desarrollo y calidad de vida. Por lo
tanto la pregunta es: ¿Cómo o qué harán con esos temas, nuestros candidatos?
De
que manera será el actuar en el tema de Educación (Proyecto Educativo Regional,
Propuesta Pedagógica, lineamientos educativos), que respondan a nuestra realidad política, económica, social,
deportiva, religiosa, cultural, tecnológica e inclusión; de qué manera se
lograrán las competencias educativas básicas que permitan buenos hombres y
mujeres para un futuro mejor. Teniendo en cuenta que la Educación es diversa,
humana; transmite cultura y expresa los
problemas de la realidad. Por lo tanto contribuye a la construcción de una
sociedad más justa y solidaria. No esperemos que vengan los iluminados de fuera
que no conocen Tumbes, y pretendan dar recetas traídas de otros lados, donde ya
fracasaron.
Que
se hará en salud, donde todavía no entendemos el elefante blanco que representa
EL NUEVO HOSPITAL, dinero del pueblo
y que hasta hoy no llega ser operativo completamente, pues en Tumbes, son
escasos los especialistas. Y tenemos que recurrir para los problemas más
urgentes, a Piura o el cercano Ecuador. Podrán ponerse de acuerdo entre el
cuerpo médico del sector salud y reconocer que es más importante la salud del
pueblo que los mezquinos intereses de quienes gobiernan a espaldas del pueblo.
La salud no son pasacalles y bombardas. Son actos de conmiseración y servicio.
Tendrán
al equipo ideal para llevar adelante un proceso de mejorar la seguridad
ciudadana, en las circunstancias en las que atravesamos, donde nadie está
seguro, sea cualquier lugar. Habrá capacidad de aunar esfuerzos entre
serenazgo, policía nacional y las fuerzas militares; que en tiempo de paz deben
contribuir con el desarrollo de un
pueblo. Como se mejorara la capacidad de nuestros agricultores y
pescadores, que hoy viven una de peores crisis. De la cual se hace necesario
salir adelante pero con recetas realistas y verdaderas, que suponen un mejor
desarrollo y proceso sostenible de vida para todos. Pues Tumbes, necesita de
los productos agrícolas y pesqueros para la vivir. No con elefantes blancos y
caballitos de batalla, como lo irrealizable y quimérico (PUYANGO y MARGEN
DERECHA), que han llenado los bolsillos de burócratas e incapaces hoy
convertidos en grandes señores de la nada e inmundicia, pues han traficado con
los sagrados intereses del pueblo y han agarrado un montón de dinero mal
habido.
Entonces
podríamos seguir señalando hitos vivos de transformación en los cuales es muy
necesario trabajar. Y que el próximo gobernante y su equipo sea capaz de
avizorar, solucionar de manera urgente, en la búsqueda de una sociedad
democrática, justa, solidaria, inclusiva, prospera, tolerante y sobre todo
forjadora de una cultura de paz.
Y esperamos,
no sea una moneda la que haga el trabajo…